MOCHILAS ESCOLARES, LA IMPORTANCIA DE ELEGIR LA ADECUADA

MOCHILAS ESCOLARES, LA IMPORTANCIA DE ELEGIR LA ADECUADA

Lo sabemos, estamos en agosto y aún de vacaciones, pero en cuanto menos lo esperemos quedarán pocos días para el inicio del nuevo curso y tendremos que preparar todo el material.

Libros, bolis, cuadernos, pinturas, … La lista es larga y, a veces, supone un buen pellizco en la economía familiar. Entre todas esas cosas hay un elemento al que debemos prestar especial atención: la mochila.

LA REALIDAD DEL TRANSPORTE DEL MATERIAL ESCOLAR 

¿Son las mochilas escolares causa del dolor de espalda en alumnos? Cada día vemos a los alumnos dirigirse a sus colegios con mochilas pesadas para transportar el material escolar y nos preguntamos si se puede asociar el dolor de espalda con este hábito.

Según la Organización Mundial de la Salud, el peso que debería transportar un niño no tendría que superar el 10-15% de su peso corporal. Es decir, si el niño pesa 54 kilos, su mochila no debería pesar más de 5 a 8 kilos. En la práctica, los escolares superan muchas veces ese peso máximo, por lo que sería necesario reducirlo con iniciativas como llevar únicamente los libros necesarios por día; llevar un fichero con los apuntes diarios de cada materia, en lugar de un cuaderno por cada una de ellas, y usar las taquillas escolares, para almacenaje de material, si es que existen.

Entre los expertos hay unanimidad: existe relación entre las mochilas escolares y el dolor de espalda. Los especialistas afirman que la sobrecarga puede ocasionar esos dolores y otros trastornos graves. Además, si este dolor es persistente, tienen mayor riesgo de padecerlo de forma crónica cuando sean adultos.

Cuando transportamos mochilas de peso excesivo la postura corporal se ve afectada de forma significativa:

• Inadecuada alineación de la columna vertebral a nivel cervical ya que la cabeza tiende a tirarse hacia delante.

• Tensión muscular localizada en la zona baja de la espalda o zona lumbar debido a la inclinación del tronco hacia delante.

• Aumento de la curvatura lumbar.

• Asimetría de los hombros en caso de transportar la mochila colgada de una sola correa o de cargarla con un reparto de pesos desigual. En ambos casos aumenta el riesgo de sufrir escoliosis o desviación de columna.

Fuente de imagen: ergologico.com

ESCOGER LA MOCHILA ESCOLAR ADECUADA

Además de adecuar el peso que se soporta, de lo que hablaremos un poco más adelante, es de absoluta importancia cómo es la mochila y cómo se lleva.

Las dimensiones de la mochila

El tamaño de la mochila debe ser acorde al del niño. La altura de la misma no debe superar la base del cuello y su parte inferior no debe estar más abajo de la cintura. Su anchura no debe superar la de los hombros del escolar.

Además, debe ser poco profunda, para garantizar que el centro de gravedad de la carga se sitúe lo más cerca posible del cuerpo.

Fuente de imagen: ergologico.com

Cómo deben ser los tirantes de la mochila

Deben ser ajustables, acolchados y anchos (no recomendable menos de 4 cm. de ancho)

Resulta muy útil el asa superior para levantarla del suelo de forma cómoda.

Cómo debe ser el respaldo de la mochila

Lo ideal es que sea acolchado, para mejorar el apoyo de la mochila sobre la espalda y evitar que el contenido pueda molestar.

Distribución interior de la mochila

Los compartimentos interiores de la mochila permiten una adecuada distribución de la carga evitando que el contenido se mueva durante el transporte.

Siempre es útil un bolsillo más pequeño con cierre, donde guardar documentos u objetos que necesitamos encontrar más fácilmente o que deben estar más resguardados.

USAR CORRECTAMENTE LA MOCHILA ESCOLAR

La clave no está sólo en escoger una buena mochila, parte del éxito está en darle un buen uso y estas son algunas recomendaciones para ello.

Evitar cargar con peso excesivo

Volvemos a hablar del peso y es que todos sabemos que este es un tema controvertido. A menudo, encontramos colegios que “obligan” a llevar un montón de libros y otro tipo de material escolar diariamente a casa.

En este sentido sería ideal la colaboración de los centros docentes, optando por los libros de texto en fascículos (mensuales, trimestrales,...), uso de pizarras digitales, potenciar el uso de fichas o de material de intranets, la existencia de taquillas, …

Lo ideal es mantener una buena comunicación al respecto con las familias, indicando tanto a alumnos como a padres cuál es el material que debe transportarse a diario y cuál puede permanecer en la escuela o quedarse en casa.

También es necesario proporcionar al niño el tiempo necesario al final de clase para que seleccione conscientemente el material didáctico necesario para llevar a casa.

Por nuestra parte, los padres y madres podemos supervisar el contenido de la mochila y enseñar a los niños a retirar los objetos innecesarios.

Además de todo lo anterior, si fomentamos en los niños la realización de ejercicio físico, serán niños más sanos, más fuertes y con una mejor postura corporal, lo que les ayudará en general en su vida diaria.

Distribuir la carga adecuadamente

A la hora de cargar la mochila, recuerda que los objetos más pesados deben situarse más próximos al cuerpo. Cuanto más se aleja la carga del cuerpo, mayor esfuerzo y riesgo para la espalda. De igual forma, procura distribuir la carga uniformemente para garantizar un reparto del peso equilibrado sobre los hombros.

Colocar la mochila de forma segura

La mochila debe ir colgada de ambos hombros para que el reparto del peso sobre el cuerpo sea equilibrado. Cuando ésta se cuelga de un solo hombro, el peso recae sobre un lado del cuerpo y la columna vertebral sufre tensiones que pueden provocar desviaciones de columna.

Es necesario regular los tirantes para que la mochila se transporte pegada al cuerpo, evitando su balanceo.

Debemos vigilar la postura, evitando ir encorvado. La cabeza, el cuello y el tronco deben estar alineados para mantener la curvatura natural de la espalda.

La forma ideal de cargar la mochila a la espalda es hacerlo subiéndose ésta a una mesa a la altura de la cadera, no desde el suelo.

En caso de tener que agacharse con la mochila en la espalda, lo mejor es hacerlo con las dos rodillas flexionadas.

MOCHILAS CON RUEDAS

Para tratar de sobrellevar el peso muchos padres optan por mochilas con ruedas. 

Un mal uso de éstas también pueden provocar problemas, al forzar demasiado la postura y hacer que el aparato locomotor realice un trabajo asimétrico. 

Al tener ruedas, tendemos a sobrecargarlas, sin tener en cuenta que en muchas ocasiones el niño tiene que subir al autobús, subir escaleras o aceras con ellas. Por todo ello, debemos tener las mismas consideraciones a la hora de llenarlas que las que tenemos con las mochilas tradicionales.

En caso de decidirnos por una mochila de ruedas, estas son las recomendaciones:

• Sería ideal que el manillar permita tanto empujarla (opción preferente) como arrastrar el carrito.

• Ir cambiando de brazo.

• Que el manillar telescópico sea ajustable a 3 alturas y permita adaptarse a las diferentes alturas de los niños.

• Es preferible que las ruedas tengan un diámetro grande, para realizar el mínimo esfuerzo al mover el carro.

• Evitar tirones bruscos al subir o bajar escaleras.

MOCHILAS PARA AFRONTAR CON ILUSIÓN LA VUELTA AL COLE

Como hemos visto hasta ahora, lo más importante es la calidad y el buen uso que hagamos de las mochilas. Sin embargo, esto no está reñido con el diseño y sabemos que esto también es algo muy importante a la hora de escoger la mochila que nos acompañará todos los días del curso.

Mochila con ruedas Superthings, disponible en nuestras tiendas Afede y tienda online

Volver a las aulas después de tantos días de vacaciones a veces no es fácil para los pequeños, por lo que debemos ser comprensivos con ellos y tratar de hacerles el inicio del curso lo más sencillo posible.

Los niños dan mucha importancia al diseño. En Afede tenemos las mochilas con sus personajes favoritos sin renunciar a la calidad necesaria. Podemos asesorarte para que volver a la rutina sea una tarea llena de ilusión.